Intenso, intuitivo y revolucionario. Volskwagen ha presentado su nueva versión del Tiguan, un SUVW para todos y todo que se renueva con un aspecto más deportivo y más robusto. Aquellas líneas modernas y dinámicas que dan forma al exterior se mueven gracias a un motor TSI que se presenta en dos versiones: 1.4 y 2.0. Ese turbo inyección es acompañado por un torque de 250 y 350 Nm respectivamente y una potencia de entre cuatro mil a seis mil revoluciones por minutos. Y todo, en tamaños que no superan los 4.7 metros de largo, los 1.8 de ancho y una altura de 1.6. En definitiva, se trata de un auto compacto y, sin embargo, potente, ideal para las familias modernas y aventuras. Además, ha llegado a Chile en cuatro modelos: Comfortline 1.4 TSI, Highline 1.4 TSI, R-Line 2.0 TSI y una edición especial R-Line Black Edition 2.0 TSI.

Diferentes, pero a la iguales. Los nuevos modelos del Tiguan comparten la esencia de la firma alemana; atributos únicos en diseño, comodidad, tecnología, seguridad y espacio. Cada detalle del vehículo está pensado en las y los usuarios con características funcionales y estéticas que lo hacen único en su clase. Por ejemplo, el asiento del conductor cuenta con ajuste eléctrico y memoria. ¡Sí, memoria! O por lo menos lo incluye en ambas versiones del Tiguan R-Line 2.0. Así también, los asientos delanteros de este cuenta con calefacción y climatización activa. Todo bajo un tapiz de cuero que eleva el nivel del SUV con tracción 4Motion, transmisión DSG 7 y llantas de 19 pulgadas. Con detalles cromados, luces LED, sunroof panorámico y un sistema de luz de curva dinámico, este modelo tiene un rendimiento mixto de 11 Km/l, 12,7 km/l en carretera y 8.9 km/l en ciudad.

Cortesía de Volkswagen

Por su parte, los Tiguan Comfortline y Highline comparten ese motor 1.4 TSI que les da un rendimiento mixto de 11,9 km/l, 14,7 km/l en carretera y 9 km/l en ciudad. Con llantas desde las 18 pulgadas, la versión más básica del Tiguan sorprende con una transmisión DSG 6 y una tracción delantera 4×2. Paralelamente, y al igual que sus pares con motor 2.0, cuenta con ajuste de altura en los asientos delanteros, soporte lumbar y posavasos, además, una tercera corrida de asientos, neblineros traseros y luces diurnas LED. Volviendo a las generalidades del nuevo Tiguan, este conserva su aspecto icónico en el exterior, “pero lo perfecciona con un frente completamente mejorado gracias a su parachoques distintivo y una amplia rejilla que se complementan con los faros LED estándar”, según explican desde Volkswagen. A la vez, refresca su parte trasera situando el nombre del modelo en la parte central del maletero. Una característica que comparte junto a otro clásico de la marca, el Touareg igual que aquellos faros traseros con diseño tridimensional.

Otra de los cambios que introducido Volskwagen en su modelo es el Control Electrónico de Estabilidad que previene que el auto se desestabilice en curvas o cambios de superficie. De la misma manera, el control de tracción ASR previene la perdida de adherencia de las ruedas y el sistema de seguridad ISOFIX que se activa tras recibir golpes por alcance. Por otro lado, el sistema de GPS Volkswagen Control permite saber dónde está tu auto o incluso inmovilizarlo a través del corte de corriente. Y lo mejor es que esto puedes hacerlo de manera remota mediante una aplicación que te permite ver su ubicación en tiempo real. Y otra de las sorpresas que incluye el Tiguan en su versión R-Line, es el sistema “Area View” de 360 grados. Con este, y su asistente de estacionamiento de serie, el SUV se maniobra automáticamente y tú solo debes acelerar o frenas y a la vez, permite observar todo el entorno del vehículo. La ficha técnica aquí.

Cortesía de Volkswagen