Más de dos décadas. Si, hace 22 años Manolo Blahnik batalló legalmente para poder llegar a los cimientos del terreno de China. La firma interpuso un procedimiento para lograr invalidar un registro que mantenía su nombre bajo una marca ilegal. Por esta razón, la casa de modas no logró comercializar en el país asiático, pero eso está a punto de cambiar. El Tribunal Supremo dictó la sentencia que confirmaba la invalidación respecto a los derechos del nombre de Blahnik. “Esto sienta un fuerte precedente para que otros en la industria hagan valer sus derechos contra las marcas pirata en China”, dijo el diseñador, enfatizando en los efectos negativos de la falsificación.

Fue un particular, quien, en 1999, registró su marca a nombre del mismísimo Manolo. Esto, bajo el sistema chino en el que prevalece el nombre de quien registre por primera vez una marca. Situación que generó un bloqueo que limitaba la venta de los productos originales españoles, que, luego de todos estos años logró invalidar el primer registro en ese país. El sentimiento de ganador se dejó sentir en toda la familia, quienes celebraron el fin del litigio que veían lejano de resolver. “Esta es una victoria significativa para mi tío, nuestra familia y nuestro equipo, y quiero expresar mi gratitud al tribunal por su consideración minuciosa y cuidadosa de nuestro caso de larga duración”, comentó Kristina Blahnik, CEO y sobrina del fundador.

Cortesía de Manolo Blahnik

Un hecho que no es muy ajeno a otras firmas de moda que han estado relacionados con registros y patentes erróneas que les han costado la venta de sus productos en diversos países. Un camino judicial que para Manolo fue más difícil de lo pensado, pero su deseo por llegar hasta otro punto del territorio comercial era más grande. Por esto, luego de ser desestimada en varias ocasiones, el equipo insistió en su derecho a apelar. Actualmente, la firma española distribuye su trabajo a 303 puntos de venta repartidos en 31 países, que incluyen los más recientes pop up y un flagship store en New York. Ahora, los favoritos de Carrie se preparan para descender en China y recuperar el tiempo perdido.

Cortesía de Manolo Blahnik