En 1924, Louis Cartier lanzó al mercado el icónico anillo Trinity, una auténtica revolución en el mundo de la joyería al entrelazar tres anillos móviles en tres tipos de oro diferentes. Cada uno de estos anillos simboliza un valor esencial: el oro amarillo representa la fidelidad, el oro blanco la amistad, y el oro rosa personifica el amor verdadero. Celebridades, artistas y miembros de la realeza, desde Grace Kelly hasta Diana de Gales y Kate Middleton, han lucido este emblemático anillo. Sin duda, el Trinity se ha convertido en un símbolo único de la maison. Ahora, para celebrar su centenario, la firma ha inaugurado una exposición temática en Shanghái.

La ciudad más poblada de China, es la primera en acoger la exposición “Trinity 100”, que recorrerá otros tres países. La muestra “Century of Classics, Eternal Style” abrió sus puertas el pasado 4 de julio en el West Bund Art Center. Esta exposición temática revela el diseño único y las historias detrás de la colección Trinity a través de diversas instalaciones de arte. Organizada por el director francés y promotor cultural Jérôme Sans, la exposición celebra a los numerosos devotos del accesorio a lo largo de los años, desde el escritor francés Jean Cocteau, uno de los primeros en adoptar el anillo, hasta leyendas del cine y la realeza.

Cortesía Cartier

Cada sala presenta una narrativa inmersiva a través de sonido, imágenes y otros elementos, inspirando a los espectadores a conectar con los cien años de historia de Trinity. Una de las salas destaca la relación mística de la Maison con el número tres, así como la historia y crecimiento de la firma bajo el cuidado de los tres hermanos Cartier. Lo más impresionante es que la exposición presentó un nuevo proyecto artístico de Cartier titulado “Imagine Infinite Circles”. Esta iniciativa reúne más de 100 obras originales de figuras artísticas de todo el mundo y de diversas disciplinas. La firma ha invitado a cada uno de estos creadores a rendir homenaje a Trinity con una obra original. Después de Shanghái, la exposición se trasladará a Singapur, Japón y Estados Unidos.

Cortesía Cartier