Ya lo había adelantado Thom Browne. La sastrería tweed es el nuevo básico masculino que no puede faltar esta temporada. Aunque históricamente este tipo de tela ya ha estado presente en la moda para hombres, las nuevas versiones lo convierten en un complemento perfecto, cómodo y moderno. Su ventaja es que generalmente está hecho en colores básicos como el grafito, el negro y el marrón. Tonalidades que convergen en esta nueva época otoñal donde el guardarropa se vuelve a llenar de prendas para mantener el calor.

Aunque no hay mucha ciencia para llevar un traje sastre, sobre todo cuando se trata de varones, es importante tener en cuenta que el estampado tweed debe ser combinado con los accesorios y colores adecuados. No sobrecargar el atuendo es el primer paso, y esto se logra con básicos como una camiseta o una camisa blanca, que serán su mejor aliado. La gracia del tweed es la elegancia instantánea que se obtiene al llevarlo en chaquetas o pantalones. Está confeccionado con un tejido de lana que es áspero, cálido y muy resistente. Su origen proviene de Escocia, de ahí su nombre.

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Y aunque te recuerda a la chaqueta favorita de tu padre o abuelo, las versiones actuales del tweed son alucinantes. La era del oversize y del traje sastre han revolucionado las piezas clásicas y las han convertido en prendas únicas, identitarias y con mucho estilo. Y si hablamos de trajes de dos piezas, la cartelera masculina tiene una eterna lista de tipos y formas, sin embargo, siempre prefieren la comodidad. Otra de las ventajas de este tipo de tela es que no necesita ser planchada en exceso y sin duda, te puede sacar de apuros.

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