A tan solo dos horas de Temuco, la capital de la región de La Araucanía, se encuentra la ciudad de Pucón. Le llaman la perla del sur de Chile, y no es por nada. El viaje de camino es apacible, entre verdes árboles y el imponente lago Villarrica, que se deja ver con toda majestuosidad desde la carretera. En las alturas y como símbolo oficial de la zona, el Ruka Pillán. Uno de los volcanes más activos de Sudamérica, posado entre un cielo celeste y cerros, que se dibujan a su alrededor. Parece ser el punto de encuentro de lugares maravillosos ubicados a pocos minutos de la ciudad, y a los que fácilmente se puede acceder. Basta con reanudar el camino e ir en busca del final del pavimento. Es el momento en que te encuentras con la naturaleza más pura. Hablamos de esa naturaleza indómita, donde el descanso y la tranquilidad son parte del panorama.

Ríos, lagos, montañas. Todo en un solo lugar, que indudablemente es uno de los mejores destinos turísticos. Así lo determinó en el año 1968, la visita de la reina de Gran Bretaña, Isabel II, en compañía de su esposo Felipe de Edimburgo. Fue en las dependencias del Hotel Antumalal, que vestida de azul deslumbró a un pueblo que hasta el día hoy le recuerda. Y es en verano que la ciudad recibe a cientos de personas, porque es cuando mejor se desarrollan actividades como el rafting, el canopy, y las cabalgatas. Sin embargo, en invierno los números de visitas se prolongan, en busca de la nieve del volcán y la calidez de sus termas. Momentos increíbles que no culminan ahí. La ciudad en sí ofrece lugares que, unidos a su verde índole, le convierten en un lugar deseado para muchos.

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Desde el centro de la ciudad se logra ver parte del lago Villarrica. Sus calles están hechas para recorrer al paso y disfrutar de la icónica artesanía en gran parte del lugar. La gastronomía no se queda atrás y son varias las posadas que reciben a los turistas con las mejores comidas. Platos auténticos que en su mayoría son preparados con productos de la zona. La comida gourmet, también se compone de piñones, castañas y murta, como alimentos tradicionales del sector. “Entrada a la cordillera” es el nombre que la cultura Mapuche le ha denominado en su lengua propia, el mapudungun, a esta ciudad increíble. Un paraíso del sur de Chile, que se mantiene vivo gracias al reconocimiento del turismo como parte importante de su desarrollo. Y tú, ¿Conoces la zona lacustre?

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