Desde su descubrimiento en 2006 hasta su estatus actual como ícono de la industria, la trayectoria de Coco Rocha es un testimonio del poder de la determinación y el talento innato. Nacida en Vancouver en 1988, fue descubierta a una edad temprana gracias a un concurso de modelos en línea. Su aspecto distintivo y su habilidad para posar de manera innovadora llamaron la atención de los grandes de la moda. Su carrera despegó rápidamente, y en poco tiempo se encontró desfilando para diseñadores de renombre y apareciendo en portadas de revistas internacionales.

Lo que diferencia a Rocha de muchas modelos es su dominio del “taping,” una técnica que utiliza cintas adhesivas para crear formas y estilos dramáticos en sus poses. Esta habilidad no solo la ha hecho destacar en las pasarelas, sino que también ha sido clave en la evolución de su estilo personal. Rocha no se limita a los estándares tradicionales de la moda; ella desafía las normas y redefine lo que significa ser una modelo.

Cortesía Instagram @Cocorocha

Coco Rocha ha sido una pionera en la promoción de la diversidad y la inclusión en la moda. Su influencia ha ayudado a abrir puertas para modelos de diferentes orígenes y tipos de cuerpo, y ha promovido una visión más amplia de la belleza. Además, su presencia en las redes sociales ha permitido que su estilo y sus ideales lleguen a una audiencia global, convirtiéndola en una figura clave en la moda digital.

En definitiva, Rocha es mucho más que una modelo de pasarela; es una innovadora, una defensora de la diversidad y una figura influyente en la moda moderna. Su carrera ejemplifica la evolución constante de la industria y ofrece una visión inspiradora de cómo la pasión y la creatividad pueden redefinir las normas establecidas. A medida que continúa su viaje, no cabe duda de que su impacto en el mundo de la moda seguirá creciendo, consolidándola como una verdadera leyenda.

Cortesía Instagram @Cocorocha