Tenemos que decirlo de una vez: los hombres sí se pueden maquillar. Sin embargo, socialmente la relación que existe entre el makeup y la figura masculina ha sido complicada, pues usarlo cuestiona la “masculinidad” de la persona. Pero, ¿cuál es el significado de ese concepto? La respuesta no es sencilla, ya que al responderla nuestros prejuicios invaden subjetivamente y respondemos lo qué es correcto para nosotros. Por lo tanto, hoy vamos a derribar este mito y te daremos unos tips de cómo lograr un beauty look que aporte brillo a tu rostro. Y una vez más, repite conmigo: el maquillaje no tiene género.

Antes de empezar, te recordaremos que la evidencia histórica ha demostrado que los hombres se han maquillado por décadas. Al estudiar los antepasados de la humanidad, se encontró que los egipcios, romanos y los griegos realizaban esta práctica. Sin embargo, en la actualidad es una actividad poco popular e incluso, es motivo de cuestionamientos. Por lo tanto, derribemos ese estigma, porque el significado de las situaciones proviene de los propios prejuicios. Ahora sí, para conseguir un makeup natural que resalte nuestras facciones y unifique el tono de la piel, es recomendable utilizar corrector de ojeras; uno que empareje las tonalidades oscuras con la finalidad de aportarle vitalidad al cutis. Asimismo, es importante sellar con un polvo matificante para que el producto no se transfiera y dure todo el día.

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Paralelamente, es muy relevante fijarse en las cejas, ya que estas son el marco del rostro y sí o sí debemos peinarlas. Así, podrías apoyarte con un fijador de eyebrows. ¿El resultado? Cejas intactas el resto del día. Asimismo, te aconsejamos incorporar en tu rutina una máscara de pestaña transparente, para que te abra la mirada. También puedes continuar con un bálsamo reparador de labios, ya que esto les entregará volumen y disimulará la resequedad. Y con respecto al blush no le tengas miedo, es ideal utilizarlo, ya que aporta un aspecto saludable a la piel; puedes escoger un tono bronce y aplicarlo en las mejillas o pómulos. Finalmente, la clave para conseguir un cutis sano está en realizar una correcta rutina de skincare que contemple los pasos esenciales: limpieza, hidratación y protección solar. Por cierto, ¡nunca olvides desmaquillarte después de una larga jornada!

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