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Woman

LA SASTRERÍA DE ALTA COSTURA DE VALENTINO

POR CAMILA LAGOS - enero 27th, 2022

Sigue la línea, céntrate en la forma. Con un lienzo blanco desplegándose sobre el Place Vendôme, Valentino dio a conocer el nombre de su Alta Costura 2022: Anatomy of Couture. Una colección compuesta por 65 looks, de mujer y hombre que trasforman la concepción del Haute Couture incluyendo nuevos cuerpos y siluetas. No son solo vestidos, sino también, una serie de piezas sartoriales que elevan la sastrería hasta esa exclusividad artesanal, armoniosa y artística. La entrega cambia las reglas y los constructos del Couture; se aleja de los ideales y reescribe los procesos. Presenta una nueva forma de hacer moda, una que se despoja de las clásicas figuras que han transitado por las pasarelas y da la bienvenida a otras corporalidades, otras edades y otros tipos de belleza.

Pierpaolo Piccioli, el director creativo de Valentino trae al mundo un espacio de Couture reinventado. Una colección tan intima como reveladora, que se despoja de las restricciones y se enfoca en la poesía del cuerpo. Como una historia serpenteante, así se presenta Anatomy of Couture, con formas suaves, texturas flexibles y volúmenes audaces que traspasan las barreras de la Alta Costura. Así, la contemporaneidad invade el clasicismo de los diseños. La pasarela rompe con la edad, la forma y el fondo, y la riqueza del mundo actual la llena de diversidad. Lejos de los modelos únicos e idealizados, la colección promueve una belleza que no es absoluta, sino variable y distinta. Las diferentes corporalidades se envuelven en piezas de algodón, gasa y vestidos de terciopelo. Una evolución, donde la maestría de los colores también hizo lo suyo.

Cortesía de Valentino

Con una armonía cromática que comenzó en la minuciosidad del negro, las piezas se desplegaron con pinceladas de azul medianoche, azul Klein, celeste, fucsia, naranja neón, verde lima, amarillo mostaza y el color de temporada, el violenta. Por supuesto, el blanco y los beige también se hicieron presente, mezclándose con exquisitos brillos y pailettes. Una yuxtaposición entre el minimalismo y maximalismo. Las siluetas simples y otras grandilocuentes, que con esos tules eternos son todo lo que esperamos de una Alta Costura. Pero tal como Daniel Roseberry en Schiaparelli que recurrió a la sobriedad para alcanzar el surrealismo, Piccioli recurre a la simpleza y la sensatez. No por eso la colección deja de encapsular el espíritu del Haute Couture, más bien, regresa a sus orígenes: piezas diseñadas a medida, según el cuerpo de la persona. Incluso los looks sartoriales albergan ese sentimiento.

Pantalones de tiro alto con pinzas que se mezclan con tops voluminosos, que, por la espalda, caen como una capa. O también, short que se combinan con blusas abultadas y tapados en forma de chal. ¿Quién podría imaginar la Alta Costura con simpleza, alejada del dramatismo? En esencia, esa suavidad acogedora y radical es la definición de la Alta Costura. Las y los modelos de todas las edades se visten con los diseños de Piccioli, quien los adapta a sus cuerpos y reescribe la belleza de la pasarela “La idea de la Alta Costura siempre fue adaptar las siluetas al cuerpo del cliente. Pero esas siluetas son típicamente soñadas, ajustadas y realizadas en un físico alto, delgado y joven” comentó el diseñador que nos recuerda cómo nació el Haute Couture. Una celebración a la diversidad y la belleza que vuelve a sus orígenes.

Cortesía de Valentino

 

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