Chatea con nosotros para suscribirte
Accessories, Opinión

GIVENCHY TK360: ¿OTRA ZAPATILLA CALCETÍN?

POR CAMILA LAGOS - abril 29th, 2022

El 6 de marzo recién pasado, Givechy, la casa, actualmente dirigida por Matthew M. Williams, presentó su pret-a-porter de Fall/Winter 22. Una colección que abrazó la simplicidad de las siluetas y el minimalismo de los colores: verdes oscuros y distintos tipos de negros. Polerones, blazers, tank tops, pantalones rectos de cuero y poleras estampadas que hacían alusión a distintas bandas de metal o rock. En general, prendas que reflejaban el enfoque cultural de la moda actual y a la vez, una representación del streetwear más puro. Una mezcla entre la deportividad y la ropa de noche, aquellos aspectos que forjaron la carrera del diseñador. Los estereotipos de las calles estaban plasmados en la pasarela de La Défense, aquel barrio al oeste de París, cuya modernidad calzaba a la perfección las siluetas presentas. Una conversación, donde la actualidad – de cierta forma – fue ironizada por Williams, quien, entre todo, incluyó las zapatillas TK630.

Un modelo que, como una extensión de la piel, se ajusta al pie tal como un calcetín. Incluso, están hechas de un material de punto que cubre desde la parte superior hasta la suela. Un hilo elástico que aporta una mayor comodidad y que es combinado con cordones, cuya función no es más que estética. Negros, blancos, rosados y hasta unos amarillos neones son parte de la gama cromática en que fue presenta la zapatilla. Colores que complementan el diseño minimalista del modelo que será lanzando el próximo 1 de julio. En general, un calzado aerodinámico y con bordes redondeados que son acentuados por los detalles de paneles interconectados en los alrededores. En general, un calzado agradable a la vista, pero que, en realidad, no es nuevo y solo se suma a la larga lista de zapatillas-calcetines.

Cortesía de Givenchy

No podemos negra la comodidad de este tipo de zapatillas; su ajuste es perfecto, e incluso se siente como si anduviésemos descalzas o descalzos. Claro, con una gran y confortable base que puede hacernos sentir en las nubes. Sin embrago, el modelo de Givenchy no presenta nada nuevo. Es más de lo mismo que hemos visto en Balenciaga, Balmain y hasta Adidas. Aquel calzado de hilo o tela elástica que, dependiendo de la marca, presenta una que otra diferencia. ¿Acaso se ha perdido la creatividad de la industria? ¿O quizás, la cultura popular la ha impactado al punto de todo es la copia es algo ya existente? Probablemente sea un poco y de esto otro. Es difícil crear algo nuevo cuando todo ya ha sido creado y cada pieza nueva no es más que una silueta o un modelo inspirado en algún archivo. Y en cuanto a las zapatillas, a pesar de su confortabilidad, ya no queremos modelos en forma de calcetín sino los clásicos de antaño.

Cortesía de Givenchy

 

Share

0