Tras destacar como director creativo de la línea masculina de Yves Saint Laurent y revolucionar Dior Homme, Hedi Slimane asumió el liderazgo creativo de la línea femenina de Saint Laurent en 2012. Su debut marcó un hito, no solo por su retorno a una casa completamente transformada, sino también porque su primer desfile, para la colección primavera-verano, fue el primero en omitir el icónico nombre de Yves. Este histórico momento tuvo lugar durante la Paris Fashion Week 2012, en el majestuoso Grand Palais. Una nueva era para la firma francesa estaba por comenzar.

Con 66 looks, Slimane deslumbró al público con prendas de sastrería impecables, pantalones y chaquetas entalladas, esmóquines y cazadoras, junto a maxifaldas que aportaban una esencia juvenil, potente y radical. La colección oscilaba entre una estética setentera y una brujería gótica, destacándose por su aire femenino y rockero. El blanco y el negro se impusieron como los protagonistas indiscutibles de la noche. Lo más llamativo fue el uso de corsetería, vestidos ostentosos, y como toque final, cada modelo lució un sombrero de ala ancha que ocultaba el rostro, intensificando aún más la atmósfera mística y de aquelarre.

Cortesía Saint Laurent

Entre los asistentes que aguardaban con expectación el debut de Hedi Slimane, se encontraba en primera fila la icónica Anna Wintour, junto a diseñadores como Alexander Wang, Marc Jacobs, Diane von Furstenberg, Alber Elbaz, la modelo Kate Moss y la actriz Salma Hayek, entre otros. La colección mantuvo la esencia de la casa francesa, pero fusionada con un lenguaje más sexy, sin perder la sofisticación característica. Los presentes quedaron conformes con el resultado, y según las palabras de Elbaz al The New York Times, el desfile fue “Muy Hedi, muy Saint Laurent”.

Cortesía Saint Laurent