Osado, rupturista, genio del arte y la moda. Estos son solo algunos de los términos que se asocian con John Galliano. Un verdadero innovador y rebelde, el diseñador británico ha sido uno de las mayores influencias de la Alta Costura. Con más de treinta años de carrera, su paso por algunas de las casas de moda más importantes del mundo lo consolidó como un maestro de su artesanía. Desde Givenchy a Dior y Maison Margiela, la trayectoria de Galliano ha sido algo turbulenta, cayendo en picado de un extremo al otro más de una vez a lo largo de los años. Lo que ha logrado, a pesar de todo esto, es testimonio de lo que solo puede ser definido como un talento artístico verdaderamente increíble, que ha resistido todo tipo de desastres, profesionales, personales o de otro tipo.

Galliano asistió a la prestigiosa Escuela de Arte y Diseño de Central Saint Martin’s College en Londres. Aquí, consolidó su esencia estética. Una especie de romanticismo retorcido llegó a distinguir sus diseños. Su trabajo era increíblemente intrincado, femenino e innegablemente opulento, pero a menudo siniestro, ligeramente aterrador y extravagante. Sus piezas no fueron éxitos comerciales, pero los críticos no pudieron negar el talento del británico. Fundó su marca homónima a mediados de los ochenta y a comienzos de los noventa se mudó a París, donde cimentó su atelier en Bastille y comenzó a presentar sus colecciones en Paris Fashion Week. Rápidamente, su talento comenzó a ser notado, y en 1995 fue elegido director creativo de Givenchy, convirtiéndose en el primer diseñador británico en dirigir una casa francesa de Alta Costura. Su tiempo en la maison duró solo dos años, pero dejó su marca con siluetas exageradas y sastrería nítida, mostrando tanto su creatividad como sus capacidades técnicas y obteniendo grandes elogios de la prensa de moda.

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En 1997, Galliano llegó como director creativo a Dior, donde pasó 14 años y mostró toda su genialidad. Aquí tuvo libertad creativa absoluta y sus creaciones fueron realmente obras maestras. En su tiempo en la maison, consiguió crear todo un nuevo concepto dentro de esta, donde la extravagancia, mezclada con la elegancia y la teatralidad bailaban entre sí. Sus colecciones ready-to-wear eran femeninas, sofisticadas y elegantes, mientras que sus vestidos de Alta Costura – donde Galliano realmente brillaba- eran simplemente magníficos e increíblemente detallados. Siempre haciendo referencias a momentos en la historia y creando una esencia de cuentos de hadas que lo consolidó como uno de los diseñadores más importantes de su generación.

Cortesía Dior by John Galliano

Pero la carrera de Galliano se vio abruptamente interrumpida cuando el diseñador fue grabado haciendo comentarios antisemitas. El incidente fue llevado a la Corte donde se le encontró culpable de incitar el odio, costándole su puesto en Dior y siendo baneado de la industria durante años. Aun así, en 2014 regresó como director creativo de Maison Margiela, donde ha conservado las inspiraciones históricas de su firma. El tiempo que lleva Galliano en Margiela ha sido altamente exitoso para la casa, lo que ha causado que esta renueve su contrato con el director creativo por años a seguir. Si bien John Galliano ha sido una figura divisiva en el mundo de la moda, hay algo que no se puede negar: su visión artística, diseños opulentos y extravagantes, aporte a la industria y talento hablan por sí solos, mostrando que se ha ganado el lugar como uno de los artistas más dotados de nuestro tiempo.

Cortesía Givenchy by John Galliano