Una diva visionaria, que se atrevió a usar transparencias y mostrar su cuerpo atlético en cada presentación. Desde las minifaldas de Roberto Cavalli hasta llevar la espalda totalmente descubierta, Paulina Rubio deslumbró a inicios de los 2000. La mexicana es recordada hasta el día de hoy como un ícono del estilo atrevido y audaz de la época.

Carisma, talento y actitud son algunas características que tiene una diva al momento de presentarse en público o en su día a día. Se sabe de las estadounidenses que marcaron un antes y después en la industria, pero fuera de estas, hay latinas que también hicieron la diferencia. Una de las más icónicas es Paulina Rubio, que se atrevió a vestir sin miedo.

Las infaltables minifaldas

La mexicana de melena rubia, a inicios de los 2000, solía llevar minifaldas -que realmente eran pequeñas- en sus conciertos y premiaciones. Amante de las prendas de Roberto Cavalli, durante un concierto en 2001 en Chicago, Paulina llevó la mini rosada de la casa de moda italiana. Algunas de cuero y otras de mezclilla, las acompañaba con gorros al más puro estilo cowboy.

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Dando paso a las transparencias 

Desde que Domenico Dolce le dijo “el mejor vestido es tu piel”, la artista siempre se interesó en mostrar su cuerpo. Para su presentación en Tonight Show en 2002, trabajó con Paco Rabanne, quien le diseñó una chaqueta que dejaba ver su atlético torso.

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Dar la espalda en los MTV 

Para algunos, el más polémico, para otros, el más icónico. En el 2004, durante los MTV Latin American Awards, la reconocida artista se presentó en el escenario con un vestido dorado transparente y su melena suelta. Todo parecía normal y cotidiano, hasta que Paulina dio la espalda y dejó ver su cuerpo casi al desnudo. En años anteriores, estas presentaciones se convertían en el espacio perfecto para la audacia, como Britney Spears bailando con una pitón en 2001. Si bien los MTV latinoamericanos solían ser menos dramáticos, Paulina Rubio quiso agregarle más emoción al mostrar su cuerpo en vivo.

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La “Chica Dorada” fue una influyente en el vestir de los 2000 y continúa siendo una influencia en la actualidad debido al persistente estilo Y2K. Su legado como diva latina trasciende su talento musical, siendo recordada por su impacto en la moda.