Estos últimos días, Chloé ha estado en los portales de noticias por tres razones: la primera, su lanzamiento Resort 24; la segunda, su colaboración cápsula con Angelina Jolie y la última, por el secreto a voces que asegura que la directora creativa Gabriela Hearst se despide de la maison francesa. Aunque aún no existe un comunicado oficial por parte de la firma, distintos medios de comunicación afirman la salida de la diseñadora para la próxima edición de la Semana de la Moda de París. Sin embargo, hasta el momento es sólo un rumor y la nueva propuesta Resort 24 es la entrega más personal de Hearst.  Sus inicios estuvieron influenciados por el compromiso con el medio ambiente y su trabajo en Chloé es reflejo de sus preocupaciones, donde su principal objetivo es lograr que la moda sea sostenible.

El Resort 24 es una extensión de los deseos de Gabriela. Se trata de “una postura más matizada y abstracta, centrada en las nociones de conciencia, circularidad y atemporalidad”, se lee en el comunicado de prensa. Esta colección nace desde la búsqueda de la responsabilidad y todo se expresa “a nivel estético y técnico”. De hecho, los atuendos están confeccionados a partir de las sobras, “es una  mezcla de prendas más elegantes, pero en realidad estás mirando la basura”, comentó la diseñadora. Claro, no de forma literal, sino metafórica. Por ejemplo, los pantalones están diseñados con un 87% de algodón reciclado y 13% de cáñamo; una fibra textil vegetal. Por ello, la entrega juega con lo que parece ser, pero no es. A simple vista podría tratarse de un jeans, pero no termina de serlo porque el tejido proviene de otras fuentes.

Cortesía Chloé

La colección es fiel a la esencia de la marca: femenina, elegante y con algunos elementos minimalistas que abrazan el poder de la simplicidad. Pero también, la diseñadora rindió homenaje al legado de Karl Lagerfeld dentro de la maison, realizó guiños en los atuendos de noche. Por ejemplo, un vestido negro con escote en la espalda de incrustaciones de lentejuelas con el motivo de una flecha o un blazer con una flecha como broche. La paleta de colores de la entrega es sobria; negro, blanco y beige son las tonalidades protagonistas y las siluetas estructuradas son el ADN de Gabriela Hearst.

Cortesía Chloé