La artista franco-húngara Anna Peter-Breton, quien ya había trabajado con la firma de joyería Graazie proponiendo motivos florales para sus envoltorios de regalo. En esta ocasión, presenta una colección titulada ‘Les porte-bonheurs du Printemps’, compuesta por siete ilustraciones que se pueden grabar en 50 joyas de la firma francesa, en plata 925 y baño de oro de 18 kilates. Para ofrecer piezas con ilustraciones singulares y significativas, Anna se inspiró en el universo floral, ya muy conocido en sus obras de acuarela y óleo. “Acabo de completar una serie muy exitosa de pinturas de cerezos, peonías y rosas. Colaborar por segunda vez con Graazie era evidente, por su universo muy anclado en la temática floral”, analiza la artista.

De esta forma, la etiqueta ofrece capullos de rosa en su estuche, que además es el emblema del sello de identidad y del packaging de la marca. Las flores también evocan la idea del regalo. Para esta colección de Primavera, a partir de siete diseños hechos a mano enriquecidos con flores -el corazón, el trébol, el sol, la luna, la mariposa, el ramo de primavera y la tierra-, los colgantes se convierten en símbolos de suerte y felicidad. “Quería darle una dimensión más artística a la marca al permitir que todos usaran el trabajo de Anna. El grabado es un gran medio por el que el cliente puede apropiarse del trabajo del artista y relacionarlo con su propia historia”, explicó Sarah Chiche, fundadora de Graazie.

Cortesía Graazie – Anna Peter-Breton

Anna Peter Breton se instaló en París hace 15 años, siendo la pintura su motor de vida: acuarela, óleo, técnica cuchillo, fresco… Entre 2019 y 2020, realizó exposiciones personales en Viena, en la sede de las Naciones Unidas; en Budapest; en Nagyszalonta, Rumania, y en Meriguet-Carrère y Galerie Sarto, en París. Lanzó, además, dos libros que integran la saga “Voyage Amoureux”, lanzados en 2021 y 2022, con sus acuarelas pintadas en recuerdo de sus viajes por el mundo. Esta encantadora colección ya está disponible para la venta y un dato clave, es que todos los grabados están hechos en su estudio creativo en el corazón de París.

Cortesía Graazie – Anna Peter-Breton