La palabra original no le queda a cualquiera, pero la firma española de Manuel Becer sabe de eso. Mané Mané nació en 2013 como una marca femenina y en aquel periodo, el concepto creativo se relacionaba con diseños sencillos, minimalistas y con cierta inspiración en trajes varoniles. Esta idea dio vida a lo que el diseñador hoy renombra como: la mujer Mané Mané.

Moviéndose en un mundo donde se viste para sí misma, al representante de la casa de moda, no busca precisamente resaltar su sensualidad, sino más bien envolverse en una gama de colores básicos y tejidos nobles como la seda y el algodón. Nociones imaginativas que forman parte de un trabajo hecho a mano y con compromiso ecológico.

Sin embargo, para quien fue ganador del Vogue Who’s On Next en 2015, el mundo de la moda necesita de excentricidad y en su última colección, lo dejó claro. Para el español, el vestir es una experiencia y no solo un acto de cubrir cuerpos. Bajo esta premisa, el diseñador detrás de Mané Mané sorprende con una evolucionada propuesta, llena de rudeza y matices en rojo, negro y blanco.

Cortesía de Mané Mané

Sus obras maestras son los corsés y estos se han convertido en los favoritos de celebridades como Dua Lipa, Rosalía o Naty Peluzo. Piezas reducidas y estampadas con diseños inspirados en la cultura eclesiástica. O también, irrumpidos por colores brillantes que convierten cualquier conjunto en algo extraordinario, tal como lo hacía esta icónica prenda en siglos pasados. Como marca emergente, Mané Mané conecta el trabajo artesanal a través de ideas exóticas, propias de una moda vanguardista, en la cual Becer se luce. Sin duda, la firma española seguirá dando de qué hablar gracias a sus pasamontañas y exuberantes diseños.

Cortesía de Mané Mané