En la actualidad el cambio constante de tendencias, formas y texturas trae consigo un problema que ya está reconocido y categorizado: el fast fashion. La industria de la moda es una de las más contaminantes del mundo y su impacto es de conocimiento de cada una de las marcas, que poco a poco comienzan a trabajar en estrategias más amigables. Pero alcanzar las tendencias es también una codicia de la industria que es muy difícil de evitar por la constante competencia que eso genera. Y es claro, hay un mercado pujante que obliga a las firmas a actualizar sus formas de trabajar y presentar un prototipo acorde a lo que está pasando hoy en día.

Todo esto conectado con la era digital y el segundo a segundo de las redes sociales. Sin embargo, y con mucho orgullo, firmas como Ralph Lauren están viviendo todo lo contrario. Cuando se indaga por internet sobre cuáles son las maneras en que los consumidores pueden aportar al cuidado del medioambiente, una de las que más se repiten es inclinarse por la calidad. Justamente es el enfoque de la casa estadounidense que es pionera a nivel mundial y que, a pesar de la presión del entorno, ha mantenido su forma de trabajo intacto, dedicada la artesanía sublime y a la construcción de productos que van más allá de una ‘moda’.

La historia partió en el Bronx, en Nueva York, donde el máximo creador Ralph Lauren nació como Ralph Lifshitx y que, muy pronto, se enamoró de la costura. Fue en 1967 cuando lanzó su propia marca, Polo Ralph Lauren, con una línea de corbatas, el accesorio que mejor supo confeccionar luego de trabajar en diversas tiendas de ropa. Su inspiración estaba en el estilo inglés y el enfoque jamás bajó desde los niveles más altos de sofisticación. Su público estaba consignado desde un inicio. Hombres sin miedo a la atención y a vivir a través de la ropa la verdadera elegancia. Y aunque más tarde se consolidó con vestuario femenino, fue la ropa masculina la que marcó un antes y un después. Tanto así que no tardó en crearse una especie de imagen patentada. Las firmas comenzaron a ver en Ralph Lauren un símbolo de masculinidad y los patrones de camisas, pantalones o camisetas se convirtieron en moldes para otros diseñadores… CONTINÚA LEYENDO EN LA EDICIÓN # 57 SUSCRIBIÉNDOTE AQUÍ.

Cortesía Ralph Lauren