“Fue un completo circo”, esa fue la frase que más se escuchó entre los insiders luego de asistir al desfile de Moschino en 2019. Para el mismo diseñador y su director creativo, Jeremy Scott, el circo no es solo una palabra lanzada al aire, es una inspiración, un tema y un espectáculo.

En el verano de 2019, la maison trajo el show a la vida en Los Ángeles con un desfile Resort que desafió las expectativas y deleitó a las audiencias. Ambientado en los terrenos de un centro ecuestre en Burbank, el evento fue una escapada de lo común.

Desde el momento en que los invitados llegaron, fueron transportados a un mundo de diversión. Carros pintados y artistas en zancos prepararon el escenario dentro de la enorme carpa. “¡Señoras y señores de todas las edades, bienvenidos al circo de Moschino!” declaró Jeremy Scott vestido con un traje de esqueleto dorado y un sombrero.

Y fue todo un espectáculo. Desde monos exagerados superpuestos sobre medias rayadas hasta trajes de rayas de cebra con lentejuelas, cada look fue un festín para el público. Los modelos desfilaron por la pasarela circular.

Pero en medio de la fantasía, también había significado. La colección hablaba de la incertidumbre y el caos del mundo, con diseños que representaban la esperanza y la desesperación. Cada pieza contaba una historia de resistencia y fuerza frente a la adversidad. Fue un espectáculo para recordar.

Cortesía Moschino