Lo que Rahul Mishra preparó para la semana de la moda de París es un tributo a la artesanía india y la prueba de su impresionante habilidad. Cuando hablamos de Alta Costura no sólo pensamos en largos vestidos y cristalería, son cientos de horas de trabajo pausado y de una absoluta dedicación. Así lo dejaban ver las piezas de Mishra desde un inicio, con delicadas terminaciones en color dorado viejo, donde los detalles hablan por sí solos. La inspiración estaba en el cosmos, como algo amplio, inexplicable y lleno de misterio. “Lo que está fuera de ti también está dentro de ti, porque eres una micro versión del macrocosmos”, explicó el diseñador, que incluyó pequeños planetas y estrellas fugaces a la colección.

Diversidad de capas con volúmenes agregados y cascadas en 3D fueron los que se robaron toda la atención. Los cortes eran exagerados y duplicaban su tamaño sobre hombros que luchaban con la gravedad. El color plata brillaba bajo la luz y no hacía falta acercarse demasiado para ver la fina cristalería y lentejuelas que adornaba la superficie. El bordado es la especialidad de Mishra y no podía estar ausente en esta entrega, que sigue siendo maximalista bajo cualquiera de los sentidos. Los colores iban como en decadencia desde azules a negros, que se combinaban con espacios de tela muy metalizados. No se trata de algo alejado a lo que ya hemos visto, pero aporta nuevos ejes de ver la moda.

Cortesía Rahul Mishra

En un cerrar de ojos el desfile nos transportó a otra era galáctica que nos hizo pensar en el “aham brahmasmi”, la frase sánscrita que significa “Yo soy el universo”. Los conceptos de la naturaleza van interpretados de forma perfecta con brillantes arrecifes, cuerpos celestes, planetas y la inmensidad de la atmósfera. El giro hacia la sustentabilidad lo da el uso de latón reciclado, que para enaltecer la entrega va acompañado de baño de oro y cristales Swarovski. La intención es mantener unidas la opulencia, la elegancia y el arte. En algunos tejidos, incluso, se logran interpretar historias que le agregan valor, donde el anhelo es conocer la inmensidad del mundo y de quienes viven.

Cortesía Rahul Mishra