La luz se encuentra con la oscuridad, en ese momento surge Balmain Fall Winter 22. Una distopía futurista que toma lugar en el árido escenario del desierto. Con esta campaña, Olivier Rousteing muestra el alcance que tiene la última propuesta de la maison francesa. Fotografiado por Mert & Marcus, el lanzamiento está protagonizado por Aweng Chuol, Cherif Douamba, Chu Wong, Christina Jugo, Claus Mukasa Kaonge, Lila Moss, Lulu Wood, Tanya Churbanova y Tye Tubbax.

Con ese estilo futurista y ese juego entre la luz y la oscuridad, Rousteing va más allá de presentar una simple campaña, plantea un poderoso mensaje esperanzador en torno a la crisis medioambiental: “No tenemos porqué estar indefensos frente a las acumulaciones tóxicas, si podemos depender de la honestidad individual, la empatía y esperanzas compartidas de progreso”. Con estas palabras el director creativo se refirió a cómo abordar el futuro. La propuesta tiene lugar en el desierto, con un extraño pozo verde intenso con escaleras, cuadrado y completamente fuera de lugar. Las modelos fueron fotografiadas con conjuntos blanco y negro haciendo maniobras entre la tierra y los escalones.

Cortesía de Balmain

Las piezas que componen la colección son tan futuristas como sexys: pantalones de cuero, faldas ajustadas, blusas, chalecos tácticos con cierre, correas elásticas, etcétera. Los looks con cuero moldeado sin costuras crean un efecto novedoso, sofisticado y contemporáneo, mientras que la sastrería modificada le da un toque clásico al mejor estilo Balmain. El más claro ejemplo del punto de encuentro entre la luz y la oscuridad son el body y el vestido largo, ambos completamente ceñidos al cuerpo, muy similares a la tendencia del naked dress, pero más abstracto. Entre el calzado destacan los botines con altas plataformas y los tacones con muchas correas.

Cortesía de Balmain