Glenn Martens lo hizo de nuevo. Luego de deleitarnos con su impecable lienzo para Jean Paul Gaultier Alta Costura en la Semana de la Moda de París, nos volvió a sorprender con una campaña ready -to-wear. Esta vez, para la temporada de Invierno 2022 de Diesel. El director creativo optó por presentar su propuesta de un mundo solo de denim combinada con las tendencias del Y2K que han arrasado en la última temporada del street style y las pasarelas. El concepto del lanzamiento posee diversos puntos que la posicionaron como una colección creativa, divertida y acertada. Gleen Martens está potenciando en un 100% la palabra rebeldía para la firma italiana.

Con una invitación comestible que hacía referencia a la ropa interior, Martens anunció su primer show presencial. Y con figuras gigantescas e inflables presentó looks impecables que reflejan los valores iniciales de Diesel. Rebeldía, irreverencia y espontaneidad son los conceptos que vemos reflejados en cada atuendo. La combinación de distintas telas, que todas hacían alusión al denim fue impecable y posicionan al diseñador como el rey de los vaqueros. Definitivamente, el director creativo de la firma italiana no le tuvo miedo a experimentar. Por otro lado, las piezas como las minifaldas, las impresiones de mezclilla sobre otros tejidos o las perfectas siluetas que confeccionó dejan una grata sensación y opinión sobre el trabajo del diseñador.

Cortesía de Diesel

Por otra parte, la propuesta del diseñador de Y/Proyect presentó piezas que a simple vista parecen no tener tela denim. Sin embargo, cuidó cada detalles y en algún aspecto de todos los looks incorporó el tejido vaquero. Asimismo, nos enseñó a modelos transformadas en una especie de ovni muy top que reflejan –junto con los demás atuendos­– la cultura pop de los años 2000. Sí, muy acorde con el Y2K. Finalmente, algunas piezas de la colección estaban confeccionadas por artesanos. Prendas hechas a mano y que en cierta medida podría asimilarse con el trabajo manual que se realizan en un desfile de Alta Costura.

Cortesía de Diesel